Primer Bocadito...

Hace unos días que viene dando vueltas en mi mente la idea de incluir "Bocados" en el Blog al margen de los escritos semanales... y finalmente me decidí por hacerlo.

¿A qué me refiero por "Bocado"? 

La verdad que cada día entiendo más y más a aquellas personas que están siempre con un libro en la mano, o que simplemente aman entrar en librerías a buscar una nueva aventura: creo que estoy descubriendo lo que es el poder de la escritura. Y no hablo del poder político o social(que también es grande), sino del poder de cambio interior. El poder sacarme del subte/bondi/tren para trasladarme a ese lugar que está siendo descripto por el libro. Puede que se trate de una historia policial, de una novela romántica o de un libro de matemáticas: cualquiera de ellos lo logrará por igual, siempre y cuando yo los deje.
Es esa fusión de horizontes entre el autor y el lector la que me apasiona cada vez más. Y es entonces que me doy cuenta que me encantaría poder compartir frases de esos escritos que leo(en diarios, libros, notas) y que quedan resonando en mi interior... Son frases que me dejan pensando, y que sin que yo las busque, logran aparecer en las situaciones más diversas para recordarme aquel pequeño aprendizaje. 

Y me parece que está bueno. Por eso quería comenzar a compartir un poco de esto con todos ustedes... 

"-¡La vida sin Bertha! ¿Qué más? Soy un hombre de ciencia, pero la ciencia no tiene color. Uno sólo debería trabajar con la ciencia, no vivir con ella. Yo necesito magia...y pasión...No se puede vivir sin magia. Esto es lo que significa Bertha: pasión y magia. Una vida sin pasión...¿Quién puede vivir una vida así?- ¿Puede usted?¿Puede alguien?
(...)
-No cometa el error de creer que ella podrá conducirlo fuera de su tiempo. No es posible romper con el tiempo: es nuestra carga mayor. Y nuestro mayor desafío vivir a pesar de esa carga."

"El día que Nietzsche lloró", Irvyn Yalom. Págs.277 y 279.